El pasado Miércoles de Ceniza, dentro de la celebración, tuvo lugar la bendición del Santísimo Cristo de las letras, que saldrá en procesión por primera vez el próximo Viernes de Dolores.
BENDICIÓN Y ENTRONIZACIÓN DEL SANTÍSIMO CRISTO DE LAS LETRAS
En este día de inicio de la Cuaresma vamos a proceder a la entronización y bendición de la esperada imagen del “Cristo de las Letras» nombre justificado por nuestro lema Calasancio Piedad y Letras, feliz combinación entre el saber humano y la propuesta cristiana, entre la fe y la cultura, que implica una visión del niño en su totalidad (corporalidad, afectividad, inteligencia, voluntad, libertad… espíritu) aceptando que en lo más hondo de sí hay una huella de Dios., puede hacerse presente el Espíritu y es Él, quien debe guiarlo y nosotros reconocerlo y colaborar.
La entronización no es sólo colocar una imagen en un lugar destacado, sino de hacer que Jesús se haga presente en ese lugar de una manera especial para que todo el mundo consagrado a él sea cada vez más consciente de la evidencia en sus vidas.
La razón psicológica para la entronización es que necesitamos signos visibles. Todo el conocimiento llega a nosotros a través de uno de nuestros cinco sentidos.
Así que Dios mismo se acomoda a nuestras limitaciones. Por ello, se convirtió en su hijo encarnado, un hombre visible; y también fundó una iglesia visible, con visibles sacramentos. En los asuntos humanos, el corazón es el símbolo del amor. Cuando Dios vino a reavivar el amor una vez más en la tierra, nos dio su corazón como un símbolo visible de su amor
Esta es una celebración importante para nuestra Comunidad Educativa por las innumerables bendiciones que puede traer a las personas, a las familias, y a todos nuestros proyectos
Por la entronización proclamamos a Jesús como Rey que nos gobierna a través del amor. Pero es más Padre que gobernante. Se convierte en, nuestro amigo, nuestro guía, nuestro consejero, nuestro médico espiritual, nuestro compañero constante en el viaje.
Que cada viernes de Dolores sepamos llevar con nuestra actitud, el Evangelio a la calle. Que esta manifestación de la piedad popular, llena de hermosura plástica y valores estéticos, nos remitan al autor de la suprema belleza que es Dios. Su contemplación, por otra parte, nos ayudará a penetrar en el hondo misterio de la redención, mostrando, a todos, creyentes y menos creyentes los acontecimientos más importantes de la historia de nuestra salvación.
Mª Carmen Aguilera Peña.
Miembro de la Comisión Viernes de Dolores.
