El sábado día 5 de Abril fue el elegido para que un grupo de Antiguas Alumnas del Colegio Divina Pastora de Martos, “acompañadas” por la Superiora, Madre Elisa Mª Luque y por las componentes de la Junta Directiva, han ido de viaje a Getafe y posteriormente a Madrid con el siguiente programa:
Salida de Martos a las 7,30 de la mañana; un camino lo más de agradable con nuestros dulces y resol para matar el gusanillo de la madrugada.
Llegamos sobre las 12 del mediodía a la residencia que las Madres tienen en Getafe y en la cual está enterrado, el Beato Padre Faustino Miguez, fundador de la Congregación, Hijas de la Divina Pastora, al cual visitamos, abriendo la urna donde está enterrado de forma incorrupta. En la puerta de dicha residencia estaban varias religiosas para recibirnos, acompañarnos y atendernos con todo el cariño. ¡De maravilla!.
En la capilla del Beato Padre Faustino tuvimos una celebración, dando lugar más tarde a la apertura de la urna. Es impresionante verlo allí; parece que duerme velando por todos/as nosotros/as. Más tarde hicimos una visita al museo dedicado a él.
Saludamos a las Madres que han estado en Martos y que han sido educadoras y profesoras nuestras ¡qué alegría ver a Madre Elisa Fernández, un referente en nuestras vidas, Madre Sara Herrero, superiora de la casa de Getafe y ¡ qué bien, nos ambientó e informó, sobre la Capilla de Beato Faustino y el Museo!
Saludamos a Madre Mª José García, Madre Pilar Gutiérrez, Madre Joaquina Paredes Nos fundimos en un gran abrazo con ellas. ¡Qué bien se encuentran!
La comida de hermandad la celebramos sobre las 13,30, ¡qué paz se respira en la Casa! nos hubiéramos quedado más tiempo hablando, recordando, haciéndonos fotos… Pero el horario había que cumplirlo y salir hacia Madrid para pasar el resto de la tarde dando un paseo por el sol que nos acompañaba y para asistir a las 19,30 a la representación de una obra de teatro titulada “Locos por el té” ¡divertidísima!, ¡lo que nos pudimos reír! No podíamos imaginarnos la calidad de la obra.
A la salida nos esperaba el autobús y para el pueblo otra vez llenos /as de alborozo ¡qué bien lo habíamos pasado! Pero ahí no quedó todo; desde que nos subimos y hasta la llegada no se cesó de cantar. Cantamos todo lo que sabíamos con la correspondiente guasa; nuestro “hit parade” ya estaba decidido: ¡Tómbola¡
Dimos gracias a la Congregación, les hicimos saber que nos encontrábamos orgullosos/as de ser sus alumnos/as, de tener los ejemplos de Padre Faustino y Madre Victoria y deseándoles un futuro aún mejor.
“Si la Peña de Martos, fue la melodía que se entonó en cuanto divisamos nuestro punto de partida.
Nos despedimos hasta la próxima vez, dando gracias por el día tan estupendo que habíamos pasado.
Aquí van estas líneas con todo el cariño.
Marisa Cruz Águila. AA